No es día de cerveza y pizza, tampoco de lomitos con coca, es día de acenturar la seducción.
Ella quizás se coloque aros grandes, el pelo recogido y los labios de un rojo furioso, sin duda lo desafía a un Sirah.
Quizás aparezca con un flequillo ingenuo, un short con brillos y sandalias, sin duda tiene ganas de risa, todo a un Sauvignon Blanc, también vale probar con el Viognier.
Se compró antejos de diseño, le dan un aire entre divertida y seria, pida un Malbec, de la Primera Zona, y dígale... ¨ Contáme, como es eso del estructuralismo ¨
Cuando la vio salir del edificio y caminar hacia Ud no lo podía creer, altísima, con sus Stilettos Rojos, la falda con un gran tajo que mostraba sus largas piernas con medias de portaligas, la blusa, de un blanco níveo y los ojos, remarcada la sugestión, nada menos que un Cabernet Sauvignon, Bicabernet, Perdriel y Los árboles.
Tenemos suerte los hombres, existe el vino, nos excusa de no ser poetas, tener poca imaginación y demasiadas urgencias.
El vino, todos, le dirán a ella lo que ella quiere escuchar, a nosotros, nos toca callarnos y servirlo.
Feliz Día de los Enamorados
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