"Tomémonos un cafecito en la Peatonal"
Le está diciendo: tengo chismes para contarte, que la mujer de tal anda con el profesor de tenis o que tal otro está saliendo con la secretaria o se trata de algo con la 4x4 nueva.
En cambio, si Pedro le dice a Juan
"Tomémonos un vino en La Aldea"
Le está diciendo: tengo un Cuento que contarte, y como todos los Cuentos, necesitan alas para la imaginación y la primera copa sirve para ubicar la historia, la segunda para mostrar a los personajes y a partir de la tercera, toma altura el Cuento y aparecen las pasiones.
Invitar al amigo a tomar vino es por una enorme necesidad:
-"Necesito que me ayudes a Creer en La Magia"
Para eso son los amigos y el vino.
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