lunes, 5 de noviembre de 2012

Marisul es una caprichosa

De chiquita, en una salida, esperada y disfrutada por toda la familia, de pronto se "atrancaba" con que quería volver a la casa porque había olvidado su muñeca o su osito Goni.
Lo conseguía, toda la familia de vuelta, apenas llegaba abrazaba a su muñeca o a su osito Goni y se dormía.
 
Era la chiquita y, qué duda, durmiendo era un ángel, cómo no perdonarle...
 
Ahora igual, de pronto se "atranca" con un tema y de ahí no sale.
 
Hay que reconocerle que cambió la forma de hacerse perdonar.
 
Prepara cenas con un toque de sofisticación, sushi o carpaccio o mariscos con apenas una salsa de limón y tabasco y Sauvignon Blanc frío, muy frío.
 
Y algo más, al color y al aroma del vino le agrega el tintinear de sus pulseras y sus aros, por supuesto, el vino joven, lleno de alegría y las risas de Marisul, más aros y pulseras, alcanza y sobra para perdonarla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario